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SOY ALCOHÓLICO

Ser alcohólico hoy en día no es difícil, comprar alcohol es fácil y barato si tienes mas 21 años. Con suma facilidad y poco mas de 1 dólar puedes adquirir una lata de 750 mililitros de cerveza con casi un 5% de volumen. Se podría decir que beber cerveza es inofensivo si lo haces con moderación y no estaríamos diciendo ninguna barbaridad, el problema llega cuando después de esa primera cerveza sientes el impulso irrefrenable de seguir tomando, te gusta sentir esa sensación de euforia, sentir que pierdes la vergüenza para hablar y relacionarte con los demás como nunca te habías atrevido. Toda preocupación se desvanece con unos tragos, si tuviste un mal día, si reñiste con tu pareja, si te despidieron de un trabajo, etc. Todo se hace mas fácil si sientes ese extraño poder que te otorga unas cervezas o unostragos de licor. Realmente es así, pero ya no solo bebes cuando algo esta mal, también tomas para festejar cualquier cosa, vas a ser padre, que mejor que unos buenos tragos con los amigos para celebrar lo machote que eres, mientras tanto tu esposa se cansa de esperarte en casa, sola. Pero claro, a ti eso que mas te da, te sientes contento, feliz, pides otra y otra, después de esas sigues hasta que amanece. Al cabo de las horas llegas y como puedes te quitas la ropa y te acuestas a dormir casi todo el día. Cuando te levantas, ya no eres el mismo de anoche, eres otra persona diferente, te duele la cabeza, tu aliento es horrible y no quieres ni ver la luz del día. Para colmo, tu mujer esta cabreada contigo y no quiere ni hablarte, no te ha dejado comida y se ha ido a casa de su hermana. A lo largo del día vas sintiéndote mejor y piensas que no has hecho nada, que trabajas mucho y que mereces relajarte de vez en cuando. Te autoconvences de que solo bebes los fines de semana y que no es grave, que puedes controlar. 

Con el paso de los días, tu mujer ya te habla, se le ha pasado el mosqueo y esta todo olvidado, así que decides salir un rato a despejarte y por que no tomar unas cervezas con los compañeros del trabajo. Por supuesto que esta vez no llegarás al amanecer, no llegarás tan pedo y mucho menos conducirás en ese estado. Con el paso de las horas y las copas, te quedarás y te emborracharas hasta mas no poder, lo peor de todo es que lo que decías no poder hacer lo has hecho, si, la has vuelto a cagar. Llegas de nuevo en un estado lamentable, despiertas a tu esposa que lleva todo el día trabajando como una mula, discutes con ella y pierdes el control. Todo se va al garete en cuestión de minutos. Al día siguiente, misma rutina de domingo, levantarse muy tarde, una resaca de mil demonios, tu mujer enojada y tu creyendo que aún puedes controlar la bebida, que no ha sido para tanto. Lo peor de todo es que ya se ha hecho costumbre, se ha hecho un habito y cuando eso sucede, es que estas hasta el cuello de hundido en el alcohol, ya no puedes esperar al fin de semana, si es lunes, tomas y si es miércoles también. Sin darte cuenta ya estas hasta el fondo, ahora empiezas a ver que tu no controlas a la bebida, la bebida te controla a ti y lo peor es que no puedes luchar contra ese maldito habito que te esta poniendo contra las cuerdas. Es como luchar contra un gigante, así que mejor lo intentas sobrellevar. 

Tomas todos los días, tu relación se ha vuelto un infierno y estas a punto de perderlo todo, así que como una ultima opción, como si de un chaleco salvavidas se tratara, le dices a tu esposa que vas a dejar de tomar de una vez por todas, ella te cree, se pone muy feliz y pasáis unos días maravillosos. Pero se acerca la prueba de oro, el fin de semana, te llaman unos amigos y les dices que no vas a salir, entonces tu mujer sale y sientes que ahora es la tuya, coges el coche y te traes solo un seis de cervezas, total un seis no es nada. Así transcurre las semanas, traes o bebes a escondidas, tu mujer al principio no se da cuenta, pero con el paso de los días encuentra unas latas en algún cajón de tu escritorio y todo se desmorona, las has vuelto a joder y esta vez definitivamente, pues tu esposa se larga y te pide el divorcio.

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Preséntate (entrada de muestra)

Esto es una entrada de muestra, originalmente publicada como parte de Blogging University. Regístrate en uno de nuestros diez programas y empieza tu blog con buen pie.

Hoy vas a publicar una entrada. No te preocupes por el aspecto de tu blog. Tampoco te preocupes si todavía no le has puesto un nombre o si todo esto te agobia un poco. Tan solo haz clic en el botón «Nueva entrada» y explícanos por qué estás aquí.

¿Por qué es necesario?

  • Porque proporciona contexto a los nuevos lectores. ¿A qué te dedicas? ¿Por qué deberían leer tu blog?
  • Porque te ayudará a concentrarte en tus propias ideas sobre tu blog y en lo que quieres hacer con él.

La entrada puede ser corta o larga, una introducción de tu vida o una declaración de los objetivos del blog, un manifiesto de cara al futuro o una breve descripción del tipo de cosas que pretendes publicar.

Te ofrecemos algunos consejos útiles para ayudarte a empezar:

  • ¿Por qué publicas tus entradas en lugar de escribir en un diario personal?
  • ¿Sobre qué temas crees que escribirás?
  • ¿Con quién te gustaría conectar a través de tu blog?
  • Si tu blog resulta ser un éxito a lo largo del próximo año, ¿qué objetivo te gustaría lograr?

No tienes por qué atarte a las decisiones que tomes ahora. Lo bueno de los blogs es que evolucionan constantemente a medida que aprendemos nuevas cosas, crecemos e interactuamos los unos con los otros. Pero está bien saber dónde y por qué empezaste, y plasmar tus objetivos puede darte más ideas para las entradas que quieres publicar.

¿No sabes por dónde empezar? Tan solo escribe lo primero que se te ocurra. Anne Lamott, autora de un libro sobre cómo escribir que nos encanta, afirma que debemos permitirnos escribir un «primer borrador de mierda». Anne está en lo cierto: tan solo tienes que empezar a escribir, y ya te encargarás de editarlo más tarde.

Cuando todo esté listo para publicarse, asigna entre tres y cinco etiquetas a la entrada que describan el centro de atención de tu blog: escritura, fotografía, ficción, educación, comida, coches, películas, deportes… ¡Lo que sea! Estas etiquetas ayudarán a los usuarios interesados en tus temas a encontrarte en el Lector. Una de las etiquetas debe ser «zerotohero», para que los nuevos blogueros también puedan encontrarte.

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